¡Shalalá!



El pasado 18 de agosto en una ceremonia, el secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio, presentó el "tema musical del Bicentenario", una canción llamada "El futuro es milenario", compuesta por Aleks Syntek y Jaime López. Desde el primer momento hubo muchos comentarios en contra de la canción, que llevaron a que Aleks Syntek cerrara "por un tiempo" su cuenta en Twitter, por, dice él "la actitud de algunos que están decididos a armar su gran campaña de desprestigio y que de paso se han tomado esto, como algo personal conmigo ,por desgracia aunque creo que cualquiera que hubiese estado en mis zapatos le hubiese ocurrido algo similar".
El sábado 21, Jaime Alcudia, director de Comunicación Social de la SEP declaró a El Universal que "El futuro es milenario" no es la canción oficial del Bicentenario, sino una melodía para "motivar a la celebración". Dijo también que hay una "pieza de concierto" escrita por José Miguel Delgado Azorín, la cual fue elegida por Conaculta a través de un concurso (y de la cual yo no encontré ninguna noticia al revisar su página).
Ese mismo sábado, el secretario Lujambio declaró que le inquieta que muchos mexicanos se pregunten si vale la pena festejar el Bicentenario, una muestra de mezquindad en el espíritu de nuestros compatriotas. Afortunadamente, dice el secretario, "hay una mayoría aplastante convencida de que hay que festejar nuestra existencia, nuestro ser y nuestra cultura".
Hoy lunes, Milenio Diario publicó una entrevista con Jaime López (puesto que Aleks Syntek no ha querido hablar con los medios desde la semana pasada). López se define como "un obrero calificado para hacer un trabajo", señala que todo es producto de una confusión, puesto que no lo contrataron para hacer un himno sino una canción alegre, que en todo caso fue error de la SEP y de la Comisión presentar el tema como algo que no es, y que a él simplemente lo contrataron para escribir un tema.
Si seguimos la línea de las declaraciones de los últimos días, tenemos entonces un tema musical presentado en una ceremonia por un secretario de Estado, que terminó convertido en un jingle hecho sólo por dinero.
¿Por qué entonces tanto enojo plasmado en Facebook, Twitter y otros medios? ¿Que acaso no es una canción más de Aleks Syntek, como "Sexo, Pudor o lágrimas" o "Una pequeña parte de tí"? ¿Qué ocurrió en este caso para que muchos nos lanzáramos (me incluyo) a la yugular de este cantante?
Yo creo que a Syntek y López les tocó ser el eslabón más débil de una cadena de errores, que comenzó cuando Vicente Fox nombró a Cuauhtémoc Cárdenas como coordinador general de los festejos. El Bicentenario mexicano aparece como un acto oficial contrahecho desde su origen. No queda claro qué queremos celebrar, por qué y, lo más importante, para qué.
Desde el sexenio pasado hemos visto que esa comisión ha tropezado una y otra vez, hasta que la Secretaría de Gobernación le "echó la bolita" a la SEP, para que se encargara de organizar unos festejos que, al parecer, serán como los de siempre, sólo que un poco más vistosos (y caros).
Muchos desfiles, mucha música y fuegos artificiales, bailes...y al final la sensación de que todo eso no tiene un objetivo claro.
En mi página de Facebook escribí: "¿Con esta canción vamos a recordar nuestro pasado y le diremos al futuro quiénes somos?". Creo que allí radica el problema. Nuestro gobierno prefiere organizar una enorme fiesta de cumpleaños que nos evite la molestia de reflexionar seriamente sobre nuestra situación actual, el pasado que nos trajó hasta aquí y hacia dónde queremos que transite la nación mexicana.
El Bicentenario debió servir para hacer esas tres reflexiones, las cuáles son urgentes en este momento, cuando México se la pasa dando vueltas sobre su eje, lleno de problemas y viendo (cuando se atreve a hacerlo) que otras naciones que estaban en situaciones peores que las nuestras están saliendo adelante.
Hace cuarenta años, Brasil y La India estaban en una situación pésima. Hoy, son la esperanza del futuro, y junto con China y Rusia serán las potencias de las próximas décadas.
La creciente influencia brasileña, el lugar que está ocupando en el mundo, le correspondía a México. Nuestro momento fue hace 20 años, cuando vivimos nuestra pequeña "revolución democrática" que nos trajo el Tratado de Libre Comercio y la salida del PRI de Los Pinos.
Recuerdo que en esos años muchos columnistas decían: "tenemos como país una oportunidad de oro, si hacemos las reformas políticas y económicas necesarias la sociedad mexicana vivirá una época gloriosa, pero hay que hacerlas ya o el tren del progreso se irá sin nosotros".
En esa época, Enrique Krauze decía que ante México se abrían dos caminos: uno apuntaba hacia España, el otro hacia Perú. El primero nos llevaría a un régimen democrático, una economía sana y una sociedad participativa y con bienestar. El segundo nos daría todo lo contrario.
El tren del progreso partió sin nosotros. No nos subimos a él cuando era el momento.
Sabemos que dejamos pasar esa gran oportunidad.
Hoy vivimos enmedio de la sangre, con grandes temores sobre nuestro futuro, y con mucha desconfianza ante lo que nos dijeron que era nuestro pasado.
La muestra de ésto es la otra actitud general ante el Bicentenario: "No hay nada que celebrar", "todo es una farsa", "no perdamos el tiempo y el dinero en fiestas que no valen la pena".
Habrá quien pueda decir "¡no exageren, es una canción más, y además está pegajosa!"
¿Deveras es "una canción más"? yo creo que este incidente pinta de cuerpo entero lo que ocurre en México en estos días. Una canción de Aleks Syntek nos ayuda a ver que nuestros festejos probablemente serán muy divertidos, pero no podrán quitarnos la angustia y el enojo ante
ese mañana que pudo ser nuestro y hemos perdido para siempre.


Comentarios

  1. Percibo una ligera disculpa hacia la negligencia de Syntek,independientemente que los demas, llamese,como se desee denominar, a cada cuak nos corresponde hacer nuestro trabajo con excelencia cada dia y si le parecio que solo seria una cancioncilla que la respaldaria por sus anteriores exitos, es como descansar comodamente en lo que ha logramos. Si el festejo es y sera algo fuera de lugar por las corcunstancias que vive nuestro pais a el le correspondia hacer bien su trabajo.

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  2. Como siempre reflexivo. Toda la anécdota de la canción refleja el hartazgo que sentimos pero también refleja que la mayoría sólo está dispuesta a criticar y señalar (me incluyo en el grupo) pero nos falta quien se anime a entrarle al toro por los cuernos, a tomar la decisión de ya no dejar las cosas en manos de los demás, por lo visto, quienes se supone nos representan no lo han hecho como merecemos ¿a caso hay alguna crítica seria por parte de los diputados de oposición a todo lo que se hace a nombre del Bicentenario? Ya no estoy dispuesta a que se nos vayan 20 años más en lo mismo, ni a que se nos vaya el tren de nuevo, algo tenemos que hacer los ciudadanos comunes al respecto. (se explayó la nena jajaja)

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  3. como se diria en la vieja Roma..."al pueblo hay que darle pan y circo" y la culpa no la tiene tanto (en este caso Aleks Syntek y Jaime Lopez) pienso que la culpa la tenemos nosotros por habernos vuelto un pueblo consumista de pura (perdon por la expresion) mierda y bastante conformista...yo la verdad no veria esto como un festejo...no vale la pena festejar tantas fallas...tantos abusos por parte de un gobierno por demas patetico cuyo proposito es mantener al pueblo sumergido en la pobreza y en la ignoracia...lastima porque tenemos todas las capacidades para sobresalir...

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  4. Verónica : es muy sencillo, la música de la canción es muy buena y la letra no tanto, cual es el problema?, que les pagaron, en este País le pagan a Servidores Públicos,Diputados, Senadores, Magistrados, Jueces etc., que no hacen nada y que dicen muchas mentiras, prefiero que le paguen Aleks Syntek mexicano con talento, y a otra cosa mariposa por que ayer me robaron el coche apunta de pistola afuera de mi casa y mi hija es una NINI.

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  5. Buen comentario y reflexión, pero yo no creo que haya paises que venturosamente aprovechan una coyuntura maravillosa, hacen todo bien y salen adelante y otros que dejan pasar estos "portales" al futuro que se abren y cierran caprichosamente. Simplemente hay sociedades que van tomando decisiones (generalmente las elites, con mayor o menor apoyo social) y esas decisiones generan caminos (path dependence, anyone?) para bien y para mal. China y Brasil son paises con los que durante mucho tiempo no valia la pena ni siquiera compararnos. Hoy parte de nuestra elite se lamenta de que "no somos como ellos". Pero ¿realmente es lo que queremos los mexicanos? Si dejamos a un lado el analisis superficial y nos vamos a los datos y los hechos, lo que China y Brasil han hecho para acelerar su crecimiento aquí sería inaceptable y sería descalificado por el coro celestial como "neoliberalismo a ultranza", "capitalismo salvaje", "entreguismo vendepatrias" "privatizaciones al capital extranjero" y otras entelequias politicas e ideologicas. ¿Son Brasil y China menos violentos que México? ¿Son países más limpios ambientalmente? ¿Tienen mayor control que nosotros de sus recursos naturales? ¿Son sociedades menos injustas? ¿Donde es menos peor ser "pobre", en Brasil, en China o en México? The grass is always greener...

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